Joel Embiid brilla y deja atrás sus viejos fantasmas | Marca
Si se tuviese que elaborar una lista de los jugadores que más controversia han generado al inicio de la NBA, sin duda los reflectores se centrarían en Joel Embiid. Es una estrella, pero durante varios meses estuvo envuelto en polémicas, ausencias y en no cumplir con las expectativas que requiere un equipo que aspira a ser contendiente, como lo son los Philadelphia 76ers. En un verano, pasó de ser un jugador titular y fundamental para Estados Unidos en los Juegos de París 2024 a desaparecer en medio de la gestión de su esfuerzo a lo largo de la temporada, discusiones con la NBA y enfrentamientos con periodistas. Se encontró bajo un intenso escrutinio, situación que cambia en la cancha, donde realmente tiene que brillar.
Embiid se 'comió' a los Charlotte Hornets (108-98) y protagonizó los mejores momentos de la noche de NBA. Volvió a ser el de siempre y endereza algo del récord de unos Sixers (9 victorias y 16 derrotas) sobre los que planeó la sombra del tankingentre lesiones estelares, la del rookie Jared McCain que asombraba y la existencia de ese fenómeno llamado Cooper Flagg en el próximo Draft. Con cinco triunfos en los último siete choques vuelve la esperanza.
Ante los Hornets, el partido de Embiid fue uno a los que acostumbra. Anotó 34 puntos en 31 minutos, pero además capturó cinco rebotes, repartió 9 asistencias y sumó en defensa, tanto con dos robos de balón como con dos tapones. Ningún pívot en la NBA llega a esos números esta temporada. Es el Embiid eficiente (50% en tiros de campo), con amplio rango de tiro, buen continuador y que saca muchas faltas con tiro a sus rivales. El de siempre.